Con el uso, la fricción y la polución o con el tiempo los cilindros acumulan suciedad y restos de macropartículas en su interior.

Esto dificulta el giro de la llave e incluso puede darnos la sensación de que roza y de que se va a romper. Para prevenir eso recomendamos la limpieza mediante lubricantes especiales para ello.

Propiedades del lubricante:

Lubrica y limpia.

Lubrica, asegurando así su correcto funcionamiento.

Protege.

Es un excelente protector contra el óxido y la corrosión, lo que alarga la vida útil de los cilindros.

Elimina la suciedad.

El poder penetrante le convierte en un potente producto de limpieza y abrillantador de cromados. Elimina los restos de suciedad sin dañar.

Desbloquea.

La acción penetrante permite desbloquear, aflojar y liberar cualquier mecanismo de rotación que esté bloqueado o sucio.

Uso.

  • Pulverizar con el lubricante introduciendo la cánula hasta el fondo dentro del cilindro. Sacar la cánula y volver a pulverizar.
  • Introducir y sacar la llave. Limpiarla con un papel o paño.
  • Repetir el proceso hasta que salga la llave limpia.

 

Nota: Se aconseja el uso de limpiadores o lubricantes sin silicona, parafina, grafito ni ningún otro componente espesante, ya que podrían hacer el efecto contrario. En el caso de productos que contengan gran cantidad de disolventes, pueden producir un efecto temporal de funcionamiento pero a la larga perjudica el cilindro o bombín.